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miércoles, 30 de enero de 2019

NO FALTANDO NADA... TENIÉNDOLO TODO.


Santiago 1:2.- Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas, Las pruebas.... Para el cristiano son necesarias. Si no hay prueba, no hay desafío, no hay esfuerzo, no hay logro y tampoco habrá recompensa. Y si no hay recompensa, no habrá felicidad por el logro alcanzado.

He llegado a la conclusión de que el cristiano vivirá de prueba en prueba, porque es lo que nos permite formarnos en el carácter que DIOS quiere. En definitiva todo lo que nos pasa es bueno para lo que amamos a DIOS, conforme al llamado a ser salvos y el propósito ministerial que DIOS puso en cada uno. Con lo que la prueba nos ayuda a cambiar como personas para bien. Y de ese cambio, influir en nuestro entorno. Por eso son necesarias las pruebas.

Y entre la diversidad, está en la de relacionarnos con personas que no se parecen, que son diferentes, que no se compaginan con nosotros. Necesariamente viviremos en este mundo y allí nos encontraremos con seres humanos de múltiples formas de actuar. Personas intransigentes, ásperas, inmisericordes, altaneras, altivas, pero también personas faltas de fe, pobres de espíritus, que se quejan, que maldicen, que no son conformes con nada. En fin, con caracteres muy diferentes. DIOS quiere que apelemos a la gracia que también es multiforme, para abarcar a la mayor cantidad de personas que puedan ser cambiadas por el mensaje del evangelio salido de nuestra boca y mostrado por nuestras acciones. Estaremos en esta vida relacionándonos continuamente con personas que serán difíciles de tratar y aceptar, pero que debemos soportar a través del amor (1 Corintios 13) y ayudarlas en el proceso de cambio hacia ser mejores seres humanos. Pero que también nos ayudaran a cambiar en alguna área de nuestro carácter que necesita ser transformada.

Santiago 1:3.- sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia. 4. Mas tenga la paciencia su obra completa, para que seáis perfectos y cabales, sin que os falte cosa alguna. Por lo que debemos tener paciencia, apoyada en la fe en que podemos superar las diferentes pruebas. Y luego de superadas, obteniendo el logro, recibiremos el premio, que es que ¡No nos faltara cosa alguna!... Es decir, lo tendremos todo. Por lo que no menospreciemos la prueba, no la esquivemos, ni huyamos, porque a la vuelta de la esquina o de la vida, habrá otro hasta más difícil de tolerar, pero a lo que nos debemos enfrentar.

Hebreos 10:35.- No perdáis, pues, vuestra confianza, que tiene grande galardón; 36 porque os es necesaria la paciencia, para que habiendo hecho la voluntad de Dios, obtengáis la promesa. Por lo que pongamos todo nuestro empeño en ser lo mejor para ayudar a seguir cambiando este mundo. Y con nuestra confianza puesta en el creador, aprobemos la prueba, y con ella tendremos las promesas cumplidas de DIOS en nuestra vida.

martes, 22 de enero de 2019

TRIUNFANDO SOBRE NOSOTROS MISMOS

2 Corintios 10:3.- Pues aunque andamos en la carne, no militamos según la carne; 4 porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas, 5 derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo.

Conversaba con un compañero de milicia, un cristiano que lucha por ser mejor persona y en medio de la conversación le hice esta pregunta, ¿A qué va la gente a la Iglesia? Y el contesto acertadamente: ¡A cubrir una necesidad!

Como Pastor mi deber es enseñar de acuerdo a la Biblia, como puede la gente satisfacer su necesidad adecuadamente. Y esa es la responsabilidad principal de la iglesia... Enseñar cómo vivir ahora y siempre. Y es más que clara y acertada cuando dice en la versión DHH: Romanos 12:1.- Por tanto, hermanos míos, les ruego por la misericordia de DIOS que se presenten ustedes mismos como ofrenda viva, santa y agradable a DIOS. Este es el verdadero culto que deben ofrecer. 2 No vivan ya según los criterios del tiempo presente; al contrario, cambien su manera de pensar para que así cambie su manera de vivir y lleguen a conocer la voluntad de DIOS, es decir, lo que es bueno, lo que le es grato, lo que es perfecto.

En otras palabras, el apóstol Pablo ruega, suplica que nos sacrifiquemos en nuestra manera de vivir y mostremos lo cristiano que somos, al no poner las cosas de este mundo por encima de lo bueno, agradable y perfecto que DIOS nos ofrece. Y lo hace por una razón sencilla... Nos ahorraremos sufrimientos.

El mundo de hoy está marcado por el status quo, por la tenencia material, por el egoísmo exacerbado, por el malagradecimiento hasta insultante, por el desamor hacia nuestro prójimo. Y como me decía alguien ayer, ¡Las personas dicen una cosa pero por dentro son otras! Somos pura fachada. No decimos la verdad y somos como meros actores en un mundo en el que queremos ser aceptados por lo que exteriormente mostramos, y no por lo que en nuestro interior somos realmente. Un mundo que debemos rechazar, pero que amamos hasta con locura. Un mundo que es vencible si tomamos en cuenta que JESUS, EL solo, lo venció por nosotros, para que nos sintamos vencedores y que cuando ese mundo venga a ofrecernos toda la carnalidad que tiene, lo rechacemos. JESUCRISTO también venció a satanás. Pero le ha resultado difícil vencer nuestra mentalidad. Esa es la fortaleza que a JESUS le ha costado vencer. Porque somos eso, mente, conocimiento y sabiduría carnal. Y ese conocimiento como si fuera un ejercicio terapéutico lo ponemos por delante del conocimiento perfecto de DIOS, con la excusa tan mundana y trillada: ¡Pero es que estamos en este mundo! ¡Cómo puedo vencer este cuerpo de muerte! ¡Este cuerpo carnal! Y hacemos poco y hasta a veces nada por ser como ese JESUS que fue a la cruz. Que decimos seguir pero se nos pierde en la espesura de este mundo bajo el cual obviamos el consejo de no vivir según sus criterios.

Menospreciamos el consejo noble, amoroso y costoso, porque costo la sangre de nuestro Señor, de nuestro salvador y que debe ser predicado y enseñado hasta ofender en nuestras iglesias. Porque esa es la responsabilidad principal de las iglesias, satisfacer nuestras necesidades enseñando el evangelio de vida para salir de las garras destructoras de la muerte... Enseñar que seguir a CRISTO, con toda su dificultad nos permitirá colocar todo en segundo lugar, para darle la mayor importancia a lo que El gano para nosotros a costa de su vida, y entregar todo lo que sabemos y ponerlo como basura. Desechar todo argumento o excusa para no seguirlo. Doblegar nuestra altivez, vaciar nuestra mente y llenarla de los principios que nos permitirán tener una mejor vida. Y eso traerá la mayor cosecha de almas para el cielo. Llenaremos el cielo de almas, por encima del propósito humano de llenar la iglesia de gente, llenarlas de solo cabezas que contar.

Utilicemos las herramientas que la iglesia enseña para salir del atolladero de la duda y emplear todas las armas, escudo, calzados, yelmos, que describo el libro de Efesios 6, para fortalecer nuestra fe y vencer no solo los engaños de satanás, no solo lo que el mundo seductoramente ofrece, sino vencer nuestra obtusa mente que se erige como una poderosa fortaleza y vivir según los criterios y preceptos divinos enseñados por CRISTO. Al hacerlo, le hará el mayor favor al evangelio. Y sumara a la obra de CRISTO.

Si después de leer esto, seguimos haciendo lo que hacíamos, entonces no culpemos a DIOS. No culpemos a la iglesia aun cuando den una mala enseñanza. No culpe al Pastor, no culpe a la biblia, porque tenemos la responsabilidad, la obligación de revisar según la biblia lo que nos enseñan. Sino revisamos, somos los únicos responsables de vivir la vida que escogimos vivir. La que DIOS nos puso a elegir entre ella y la muerte. Es duro pero no menos cierto. Vivamos según lo que CRISTO gano, enseño, y nos dejo como legado. Sigámoslo según su palabra, salgámonos de nuestra mente y dejemos entrar verdaderamente a CRISTO en ella y definitivamente entreguémosle nuestro corazón. Así obtendrá la satisfacción de sus necesidades y vivirá la mejor vida que pueda vivir, no la del mundo. No, no, no... Sino la vida que JESUS escogió para usted... Para nosotros... Para la humanidad.... Y podrá decir como el Apóstol en: Filipenses 1:21.- Porque para mí el vivir es CRISTO, y el morir es ganancia.

Yo digo Amen a eso... Y ¿Usted?...

miércoles, 16 de enero de 2019

CARTA ABIERTA

Romanos 14:1.- Reciban bien al que es débil en la fe, y no entren en discusiones con él.

Hace aproximadamente 5 meses, sostuve una muy corta conversación con una obstetra que me mencionaba que tenía un primo pastor y me hacia la pregunta de que si yo lo conocía. Al mirar una foto del mencionado, dude porque no estaba seguro. Y le respondí: ¡Bueno, sabe que estamos en la ciudad que más iglesias cristianas tiene en Venezuela, por lo que es difícil conocer a todos los pastores de la ciudad!

Al salir, me ataco un pensamiento muy fuerte, recordándome una triste noticia. Vivo en Ciudad Guayana, Estado Bolívar y mi oficio actual es ser Pastor de una pequeña congregación. Y conozco y sé de muchas iglesias en esta ciudad, la cual esta ranqueada como la segunda ciudad más peligrosa de Venezuela y la octava del mundo. Y la pregunta es ¿Como que una ciudad que tiene tantas iglesias, puede ser tan peligrosa? Y concluí que la respuesta es, por la falta de unidad integral entre las iglesias.

Eso me entristeció. Y permítanme decirles que esta falta de unidad la he experimentado en carne propia...

La iglesia que está consciente de su papel, se ha sumido en un letargo prolongado de negligencia en lo que se refiere a la unidad entre ellas. Y basta tener conversaciones no solamente con otros pastores, sino entre cristianos nominales. De los que no tienen un papel o una función ministerial.

La feligresía habla muy mal de las iglesias. Hablan muy mal de los Pastores e inclusive de sus propios Pastores. Existen cristianos que se expresan muy mal del papel que desempeñamos y con razón, porque no hemos asumido una posición, ni enseñado la posición que como iglesia debemos ser respecto a la unidad. Porque cada Pastor está centrado en su rebaño. En sus 50, sus 100 o sus miles. Y no quieren unidad con otro rebaño porque según su Biblia o según su verdad, anteponen diferencias, como por ejemplo, la de que hay que cuidar la sana doctrina en la que se creen fuertes y eso no permite la unidad. Cuando la biblia nos enseña, que aunque seamos fuertes recibamos a los débiles. Que debemos ser un solo cuerpo, que debemos recibirnos los unos a los otros. Que le demos la mano al que esta caído y eso incluye el contexto macro de iglesia.

Hay iglesias que se están levantando y que solicitan la ayuda de las “grandes” y estas son menospreciadas porque son pequeñas, olvidándose que alguna vez ellas lo fueron. Es triste esta realidad. Y esa realidad que no es la verdad nos impide ser unidas. Y por ende el bien que debemos hace no lo hacemos. Que es ser unidos por encima de todo, poniendo por delante el amor. Olvidándose del que está encima de todo que es Cristo. El que nos dice todavía hoy, en su sermón del monte que debemos ayudar al que lo necesita, al pobre, al que adolece de algo, al que se está iniciando. Y toda la responsabilidad cae sobre nosotros... los Pastores. Los “lideres” que no enseñamos lo que JESUCRISTO nos enseño, lo que nos mando. Y por eso tenemos una feligresía dividida e inclusive famélica. Con un pobre discipulado, o una mal enseñada disciplina del servicio, disfrazada de liderazgo en el que solo se ama a los que les aman.

Y esto parecerá una manifestación de frustración, de resentimiento. Bueno, lo tomare así. Pero como cuesta poner todo a la disposición del que lo necesita. Cuando JESÚS dice que inclusive vendamos todo y pongámoslo a la disposición de los demás. De que pensemos en el bien del otro. Que no nos cansemos del hacer el bien, primeramente a los de la fe. De qué el que tiene bienes de este mundo y ve a su hermano tener necesidad, y cierra contra él su corazón, ¿cómo mora el amor de Dios en él? Pero si cierra el corazón Si encoge la mano. Obviamos a priori estas enseñanzas.

Como unimos la ciudad en torno a Cristo, si nosotros los cristianos No mostramos el amor entre nosotros. No somos unidos como iglesia, porque los pastores que debemos dirigir, dirigimos mal Pensamos solo en nosotros. En mi bien, En mi iglesia, en mi rebaño, en mi pertenencia y como decía mi suegro, ¡Comiendo yo no falta más nadie! ¡Si tengo lo que necesito, a mí que me importa las otras! ¡Que me importa la ciudad! ¡Que me importa el país! ¡Que me importa el mundo! ¿Para qué preocuparme?... ¡Yo estoy bien! ¡Soy fuerte!.... ¡Tengo una “Iglesia”! ¡Mi iglesia! Triste, muy triste. Pero... Hay una esperanza. Sé que también hay algunos dejándose dirigir por el Espíritu Santo, que buscan la unión. Que se ofrecen por los demás. Que dan la vida por los otros, inclusive de sus enemigos para glorificar a Cristo, Glorificar a Dios y a la iglesia.

¿Queremos cambiar el país? Pongamos en práctica la manera de amar de JESÚS entre nosotros...

Porque el amor es todo. Es el vínculo perfecto. Es el enlace perfecto de la unión. El amor permite por encima de cualquier diferencia, tolerar, soportar a su hermano. E inclusive sufrir por él. Si tenemos ese amor, DIOS se mostrara en nuestras iglesias y en nuestro país.

Efesios 2:4.- Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó, 5 aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos), Como salvo, ame. Como salvo, tolere. Como salvo, únase. Como salvo sea una carta abierta del amor.

Efesios 5:2.- Traten a todos con amor, de la misma manera que Cristo nos amó y se entregó por nosotros, como ofrenda y sacrificio de olor agradable a Dios. 

Dios les bendiga..... Alguien dice, Amen....