Salmo 142:1.- Con mi voz clamaré a Jehová; Con mi voz pediré a Jehová misericordia. 2 Delante de él expondré mi queja; Delante de él manifestaré mi angustia.
Descubrí hace bastante tiempo, que podemos quejarnos y lamentarnos de nuestra situación... Y así lo expuso David, y también lo hizo Gedeón en Jueces 6. Lo hizo Moisés en Números 11... Y hasta Job lo hizo. En:
Job 10:1.- Está mi alma hastiada de mi vida; Daré libre curso a mi queja, Hablaré con amargura de mi alma. 2 Diré a Dios: No me condenes; Hazme entender por qué contiendes conmigo....
Dios le da libre curso a nuestra queja, a nuestro lamento cuando se lo llevamos ante El. Ante su presencia... Porque cuando nos quejamos entre nosotros mismos... Dios no hace nada. Y más aun, cuando nos quejamos de Él, las consecuencias no suelen ser por lo general muy buenas.
Y los ejemplos también están... Le paso a Israel a lo largo de toda su historia. En:
1 Corintios 10:9.-Tampoco pongamos a prueba al Señor, como lo hicieron algunos y murieron víctimas de las serpientes. 10 Ni murmuren contra Dios, como lo hicieron algunos y sucumbieron a manos del ángel destructor. 11 Todo eso les sucedió para servir de ejemplo, y quedó escrito para advertencia nuestra, pues a nosotros nos ha llegado el fin de los tiempos.
Dios sabe de nuestra aflicción, de nuestras tribulaciones... De nuestros lamentos... Pero al igual que en todas las situaciones, quiere que le llevemos nuestras cargas a El... que lo llevemos todo ante El... Que lo busquemos a EL primero y eso incluye, exponer nuestras quejas... Dice en:
Filipenses 4:6.- No se aflijan por nada, sino preséntenselo todo (Quejas, lamentos, quejidos, clamores, aflicciones, desengaños, ira, contienda, preocupación, enfermedad, lo que sea que le pase) a Dios en oración; pídanle, y denle gracias también. 7 Así Dios les dará su paz, que es más grande de lo que el hombre puede entender; y esta paz cuidará sus corazones y sus pensamientos por medio de Cristo Jesús.
Si lo hacemos, tendremos lo mejor... Paz... Sobrenatural...
Es difícil... No, para nada... Pero lo hacemos difícil... Y es porque nuestra fe es vaga, débil, insegura. Porque la convicción de fe, nos dice que cualquier situación será resuelta por Dios... La biblia demuestra que después que todos llevaron su queja ante Dios, obtuvieron la mejor respuesta.
Así que un consejo más de la biblia...
No hable de Dios, hable con EL
Con confianza, creyendo que El le escucha... Y tendrá lo mejor de Dios, en certidumbre de su Paz, en su mente y su corazón... En gozo permanente... En plenitud de Cristo.
